Imagenario – Manuela Marin
Dormir y soñar, soñar e imaginar, imaginar y crear, crear y hacer, el hacer y la manufactura, la manufactura y el cuerpo. El inicio: algo imaginado, casi un sueño, o mejor, un sueño de verdad, uno de esos que solo tenemos cuando dormimos. Tomarlo como punto de partida para crear algo, algo propio, una colección de imágenes del inconsciente.
Imagenario – Manuela Marin
Dormir y soñar, soñar e imaginar, imaginar y crear, crear y hacer, el hacer y la manufactura, la manufactura y el cuerpo. El inicio: algo imaginado, casi un sueño, o mejor, un sueño de verdad, uno de esos que solo tenemos cuando dormimos. Tomarlo como punto de partida para crear algo, algo propio, una colección de imágenes del inconsciente.
Imagenario – Manuela Marin
Dormir y soñar, soñar e imaginar, imaginar y crear, crear y hacer, el hacer y la manufactura, la manufactura y el cuerpo. El inicio: algo imaginado, casi un sueño, o mejor, un sueño de verdad, uno de esos que solo tenemos cuando dormimos. Tomarlo como punto de partida para crear algo, algo propio, una colección de imágenes del inconsciente.
Imagenario – Manuela Marin
Dormir y soñar, soñar e imaginar, imaginar y crear, crear y hacer, el hacer y la manufactura, la manufactura y el cuerpo. El inicio: algo imaginado, casi un sueño, o mejor, un sueño de verdad, uno de esos que solo tenemos cuando dormimos. Tomarlo como punto de partida para crear algo, algo propio, una colección de imágenes del inconsciente.
Imagenario – Manuela Marin
Dormir y soñar, soñar e imaginar, imaginar y crear, crear y hacer, el hacer y la manufactura, la manufactura y el cuerpo. El inicio: algo imaginado, casi un sueño, o mejor, un sueño de verdad, uno de esos que solo tenemos cuando dormimos. Tomarlo como punto de partida para crear algo, algo propio, una colección de imágenes del inconsciente.
Imagenario – Manuela Marin
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Imagenario – Manuela Marin
Dormir y soñar, soñar e imaginar, imaginar y crear, crear y hacer, el hacer y la manufactura, la manufactura y el cuerpo. El inicio: algo imaginado, casi un sueño, o mejor, un sueño de verdad, uno de esos que solo tenemos cuando dormimos. Tomarlo como punto de partida para crear algo, algo propio, una colección de imágenes del inconsciente.
Aprovechar el proyecto de grado para recibir el título de Maestra en arte para hacer algo con los intereses íntimos. Hacer algo que probablemente nadie más va a hacer con mis sueños, porque son imágenes que sólo yo he podido soñar.
Lo que escogí de mis sueños son las imágenes, personas y lugares cuando se muestran como una constante mutación entre lo que tengo almacenado en mis recuerdos y lo que mi inconsciente junta y crea a partir de lo real y lo imaginado.
1 Imagenario, con “e”. Mezcla las palabras “imagen” e “imaginario”, creando un neologismo a partir del cual juego con los puntos de contacto entre ambos conceptos. Porque veo mi proyecto como una colección de imágenes que existen en mi imaginación.
