Este es solo un punto de partida, una plataforma que requiere ser caminada, que se entreteje, estiba tras estiba, desde la individualidad, para comprender la complejidad del todo.

El ser humano encuentra en las montañas sabiduría y entendimiento.

Elevarse para cambiar de perspectiva,

alejarse para sentir la unidad del ser,

encontrarse para entrar en comunión con ellas.

Figuras sublimes, tan humildes,

tan receptivas, tan blandas,

Es a partir de nuestra insignificancia frente a ellas, y bajo su manto acogedor, que somos parte de algo más grande, parte por parte, holón por holón configurando el Kosmos.