Es un proceso que ha dictado su rumbo con recuerdos. Este es un registro de la última fase de la piel seca que decidí volver a reconstruir. El barro blanco se convirtió en estos seres en el momento que, sobre una superficie, mi piel se restregaba buscando una forma para dibujar.
Luego de que se secara y apartara de un primer soporte, decidí conservar sus escamas polvorientas para realizar un ritual en el que estos cuerpos creados por mi piel, revivieran sobre los poros del cartón.