Con este proyecto pretendo animar un sueño (más bien pesadilla) de mi infancia.

Algo caótico y perdido en el tiempo, una historia inconclusa, inconexa y caprichosa que me persiguió cada noche de fiebre desde los 4 o 5 hasta casi los 10 años. ¿Por qué animación digital? Soy una obsesiva del control, ¿qué mejor técnica para demostrarlo que una en que tengo el absoluto poder y capacidad de dibujar y redibujar ¡y redibujar! un punto, una línea, un movimiento o una escena hasta que quede tal como la veo en mi cabeza? No pretendo apegarme fielmente a la historia del sueño, porque después de 12 años algunas partes ya se me han escapado, mi memoria las ha deformado o simplemente ya no me importan. Pero al menos quiero compartir la sensación de no entender nada que sentí tantas veces con aquel sueño, ese enfrentamiento a una guerra subconsciente (y probablemente consiente) que viví durante esos años; y, ¿por qué no?, también deseo compartir una muestra del proceso que, a costa de lágrimas, crisis, insomnio, risas histéricas y muchos “ctrl + z”, “¡dibujé en la capa que no era!” y “ANIMATE CC NO RESPONDE” me llevó a concretar este corto.